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12 mar 2016

«Es mejor encender una vela que maldecir la oscuridad»

Ayer miraba un documental, un documental que me impactó y lloré. No sé a quién carajo le importa si lloré o si me impactó o si miré un documental pero tengo ganas de contarlo.

Hay muchas cosas en mi cabeza, cosas que supongo vienen con el paso del tiempo y me he sentido triste, más triste que nunca.

La soledad siempre ha sido parte de mi vida, no se trata de estar acompañado o no, no se trata de tener mucha gente alrededor o no tenerla, se trata de algo más profundo y difícil de explicar.
Tal vez lo sientas, o lo hayas sentido alguna vez. Es como si no tuvieras tierra bajo los pies, como si todo lo que te rodea fuera irreal, o estuviera desfasado, es como un «no pertenecer al aquí y al ahora» 

Y ese "documental" despertó sentimientos que tenía un poco sumergidos en la neblina del subconsciente y emergieron.
Y emergieron no como cualquier cosa sino como un tsunami que se llevó mi corazón a la infinita cantidad de realidades que conviven paralelamente con la mía.

En este momento estoy muriendo, vos también y a nadie le importa. Lo mismo sucede con todas las especies que habitan el planeta, y a nadie o muy poca gente le interesa.

Una frase que dejo aquí (no es mía):

«Es mejor encender una vela que maldecir la oscuridad»

Soy un grano de arena en un inmenso desierto repleto de granos de arena, pero seré un grano de arena distinto aunque a nadie le importe. Me importa a mí.